Alimentos para el bien

A fines de agosto, el huracán Dorian se formó sobre el Océano Atlántico. La tormenta golpeó Bahamas el 1o de septiembre. Derrumbó edificios, inundó vecindarios y mató a 51 personas. Muchas regiones quedaron sin energía o agua.

Tan pronto la tormenta pasó, un equipo de chefs y otros voluntarios entraron en acción. Juntaron helicópteros, barcos, hidroaviones y camiones. Armaron cocinas temporarias. Empezaron a producir en masa 30,000 comidas por día. Luego, empezaron a entregar alimentos. Fueron a escuelas, clínicas e iglesias. El chef José Andrés estaba a cargo de dirigir el esfuerzo.

UNA COMIDA CALIENTE El chef José Andrés sirve alimentos a sobrevivientes del incendio Camp de California en 2018.

Andrés es dueño de restaurantes populares en Estados Unidos. También es el fundador de World Central Kitchen (WCK). Es un grupo sin fines de lucro. Cocina comidas para personas afectadas por desastres naturales y otras emergencias.

“Llegaremos a cualquiera que necesite comida, de una manera u otra”, dijo Andrés a TIME for Kids desde Bahamas. En el momento de publicación, WCK había servido ahí alrededor de 300,000 comidas.

Chefs en acción

WCK empezó la fase de alivio de desastres de su misión en 2016. Fue cuando el huracán Matthew golpeó a Haití. Dejó a muchas personas sin alimentos.

Por lo general, después de una emergencia, las agencias de alivio entregan comidas empaquetadas no perecederas. Algunas de las comidas no son muy saludables. Con frecuencia, no tienen buen sabor.

Andrés pensó que podría hacer algo mejor. Como chef, ha tenido experiencia en encontrar ingredientes. Era bueno para crear recetas. Y tenía habilidad para dirigir una cocina. Además, sabía el poder de los alimentos. “Una comida caliente representa amor. Representa esperanza y humanidad”, dice Andrés. “Esta conexión humana es muy importante cuando un desastre afecta profundamente a las personas”.

BUENO PARA COMER Un niño en Bahamas disfruta de una comida de World Central Kitchen después del huracán Dorian.

Los alimentos servidos por WCK son frescos y saludables. Cuando es posible, incorporan ingredientes locales. Las recetas están diseñadas para atraer a los gustos de la región.

Los chefs de WCK tienen atajos para cocinar grandes cantidades de alimentos rápidamente. Andrés creció en España. Ahí los cocineros usan ollas masivas para cocinar un plato de arroz llamado paella. Se dio cuenta que las ollas de paella podían usarse para todo tipo de alimentos. Ahora los cocineros de WCK las usan para todo desde pasta hasta jambalaya. De esta manera, pueden cocinar para 500 personas a la vez.

“Cuando hay una emergencia médica, ¿a quién enviamos? A doctores, por supuesto”, dice Nate Mook. Es el director ejecutivo de WCK. “Cuando existe una emergencia de alimentos, deberíamos enviar a las personas que conocen mejor a los alimentos, y estas son los chefs”.

ESFUERZO DE EQUIPO Los voluntarios de World Central Kitchen alimentan a personas hambrientas en Venezuela a comienzos de este año.

Mejor juntos

WCK tiene alrededor de 25 miembros de personal. Pero mucho de su trabajo es donado por voluntarios. Muchos son de las áreas afectadas. Veinte mil voluntarios sirvieron alrededor de 4 millones de comidas después de que el huracán María golpeó a Puerto Rico, en 2017.

Andrés contó a TFK sobre una niña de 10 años llamada Lola. Ella dirigió una sección entera de la cocina por su cuenta. “Ella se convirtió en un general en mi ejército de voluntarios”, dijo. “Es mi héroe”.

EN MEDIO DE LAS SECUELAS Los voluntarios de World Central Kitchen transportan alimentos por barco para los sobrevivientes del huracán Dorian.

Cocinas limpias

En Haití, es común que las comidas escolares se cocinen en interiores sobre fuegos. Esto puede ser peligroso. Y no es saludable para estudiantes, maestros y cocineros. Ellos inhalan el humo de las llamas.

WCK quiere ayudar. El grupo ha construido o renovado más de 140 escuelas en Haití. En muchas de ellas, ha instalado hornos a gas. Además, ha instalado fregaderos y conductos de agua. Esto facilita la limpieza.

Todo esto hizo que las escuelas sean más limpias y seguras para más de 65,000 personas.