Regreso a la vida salvaje

Los lobos grises han deambulado por Norteamérica por lo menos por medio millón de años. Su hábitat incluía hace tiempo la mayor parte de Estados Unidos continental. Pero durante los años de 1800 y comienzo de 1900, los lobos fueron cazados hasta casi su extinción. Para la década de 1960, la población de lobos en EE.UU. se limitaba a un manojo de criaturas.

Entonces, en 1973, la propuesta de la Ley de Especies en Peligro de Extinción (ESA, por sus siglas en inglés) se convirtió en ley. Esta protege a animales que están en riesgo de extinguirse. Los lobos grises fueron colocados en la lista de especies en peligro. Matarlos era ilegal. Y el gobierno de EE.UU. trabajó para apoyar la conservación del lobo. Un ejemplo famoso de este esfuerzo empezó en 1995. Treinta y un lobos fueron trasladados de Canadá al Parque Nacional Yellowstone. Para 2015, más de 500 lobos grises estaban viviendo en el Ecosistema Mayor de Yellowstone.

LIBRES PARA DEAMBULAR Un lobo es liberado en el Parque Nacional Yellowstone en enero de 1996. El lobo fue reubicado de Canadá como parte de esfuerzos de conservación.

Hoy, EE.UU. continental es el hogar de más de 6,000 lobos grises. El 4 de enero de 2021, el gobierno de EE.UU. retiró a los lobos grises de la lista de especies en peligro. Usualmente, la eliminación de la lista de un animal sería causa de celebración. Pero algunos dicen que los predadores aún necesitan protección.

Una diferencia de opinión

“Los lobos son controvertidos”, dijo Adrian Treves a TIME for Kids. Él es un experto en lobos en la Universidad de Wisconsin–Madison. “Las personas no pueden ponerse de acuerdo sobre su estado de protección o si están realmente seguros”.

En algunas partes del país, los lobos están bien. Pero en general, ocupan muchas menos tierras que antes. Los lobos solían vivir en la mayoría de EE.UU. Ahora, están en menos de una docena de estados.

JAURÍA JUGUETONA Los lobos juegan en un bosque nevado de Montana. Su pelaje grueso mantiene a los animales calientes.

Los expertos no están de acuerdo sobre el objetivo de la ESA. Algunos dicen que la ley debería proteger a un animal hasta que reclame su área original. Otros argumentan que siempre y cuando una especie no corre riesgo de extinguirse, no pertenece en la lista de especies en peligro de extinción.

David Bernhardt era el secretario del interior en octubre de 2020. Es cuando el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE.UU. anunció su plan de retirar de la lista al lobo gris. Según Bernhardt, el lobo “no es una especie amenazada ni en peligro de extinción”.

PREDADOR FEROZ Un lobo amenaza a una manada de bisontes en el Parque Nacional Yellowstone. Los lobos cazan y matan a los bisontes para comer.

Pero Jason Rylander, de Defenders of Wildlife, no está de acuerdo. A él le preocupa que la población bajará nuevamente: “Tenemos que preguntar, ‘¿Ha realmente terminado el trabajo de recuperación de esta especie?’ Desde nuestro punto de vista, no lo está. Todavía hay muchos lugares donde la población aún no ha regresado”.

LOS CACHORROS CRECEN Estos lobos grises son cachorros. Los adultos pueden pesar 100 libras. Los animales viven en grupos llamados jaurías.

¿Qué sigue?

Grupos conservacionistas están demandando al gobierno sobre su decisión de retirar al lobo gris de la lista de especies en peligro de extinción. Rylander espera que sin importar qué ocurra, las personas y los lobos puedan vivir juntos pacíficamente. Este grupo está encontrando maneras de hacer que esto suceda. Estas incluyen el uso de cercas portátiles para mantener a los lobos lejos del ganado.

Por ahora, la protección de casi todos los lobos depende de los estados. En noviembre de 2020, Colorado aprobó una ley que protegería a los lobos dentro de sus límites.

Datos del lobo gris

El lobo gris es un predador feroz. Tiene dientes largos y mandíbulas poderosas. Puede perseguir a su presa a más de 35 millas por hora. Un macho típico pesa alrededor de 100 libras. Tiene más de seis pies de largo. (Esto incluye su cola espesa, la cual tiene uno o dos pies de largo).

Los lobos viven en jaurías de hasta 30 adultos y cachorros. Se comunican entre ellos con expresiones faciales y las posiciones de sus cuerpos y colas. El aullido ayuda a los miembros de la jauría a permanecer en contacto.